Mi última compra en
Apple, un
iPod Nano rojo de 8
Gb, una
extensión de mi
MacBook. El
iPod de 4ª generación vuelve a su estilizado diseño original
así que me lo compré en el
Appel Store, solo puedo decir que la entrega fue
rápida y particularmente prefiero comprarlo por
internet que en un
reseller oficial, cuestión de gustos.

La sincronización con el
mac fue perfecta, no puedo decir lo mismo que con
Windows porque ya tuve una mala experiencia; primero la lentitud en añadir el nuevo dispositivo y segundo el casual cuelgue del sistema, cosas que ya son historia desde que me pasé a
Linux y posteriormente me hice un "
switcher", término que no me gusta, prefiero decir que comparto la
filosofía de
Apple y llamarme "
mackero" o simplemente que soy de
mac.
Lo
único malo que
encontré del
iPod fueron los auriculares, ¡qué malos son! Si vas por la calle ya no escuchas nada y el sonido es
normalillo, la verdad que para lo que cuesta el
iPod, unos 139 €, los de
Apple podrían estirarse un poco más y cambiar los auriculares por unos mejores y de más calidad a la que nos tienen acostumbrados con otros productos. La solución al tema de sonido me la
recomendó Tomás, que se documentó en el asunto y dio con la clave del
éxito al descubrir los
Sennheiser CX 300-II Precision, unos auriculares de calidad de sonido insuperable para su precio; unos 49 € pero de verdad que fueron bien gastados.

Tienen un sistema de altavoz dinámico de alta calidad y un potente sonido estéreo con excelente respuesta de bajos que te dejan sin palabras, solo nos hacen soñar con el sonido que deben dar los
Shure SE310, soñar digo, ya que su precio es prohibitivo para muchos, por ejemplo un servidor, que veo mejor invertido ese dinero en una
minicadena Hi-Fi Onkyo que tengo en mi lista.
El contenido del
blister trae a parte de los 3 juegos de adaptadores para el
oído una especie de "bolsa de transporte" que a mi me recuerda a los monederos de regalo que te dan en un bar pero de una piel de mejor calidad, que en realidad es indispensable para llevar los auriculares de viaje con el mínimo cuidado que se merecen. Sencillamente son perfectos, por cierto los compré rojos para que hagan juego con mi
iPod.
Unos auriculares que recomiendo a todos los que aprecian un buen sonido en su canción favorita.